En este curso comenzamos señalando las posibilidades, y también las limitaciones, del escalado de una metodología como Scrum. Siendo este escalado una posibilidad útil para proyectos de cierto tamaño, podemos ampliar el punto de vista hacia DevOps, pensando en un escalado horizontal en el cual integramos los equipos de desarrollo, y los equipos de operaciones.
Pero cada vez con más frecuencia, la necesidad de la empresa radica en agilizar todo el trabajo de sus departamentos, en la búsqueda de entregar soluciones finales a los clientes de la manera más continua posible, y con la capacidad de responder a tiempo a las oportunidades del negocio que aparezcan: a esto le denominamos agilidad corporativa.
Para conseguir esta agilidad corporativa, hablamos de escalar el enfoque ágil más allá de los proyectos, construyendo trenes de trabajo ágiles, que iremos implantando progresivamente hasta que todos los profesionales de la organización se adhieran a la cultura y estilo de trabajo ágil.